Dentistas se preparan para atender y aplicar medidas de protección establecidas ante el Covid-19

Brújula Digital |09|05|20|

La atención de los dentistas con la aplicación de nuevas medidas de protección, que buscan prevenir contagios del Covid-19, sufrirá diferentes cambios en relación al pasado inmediato cuando no estaba presente la pandemia y el ciudadano acudía al odontólogo sin mayores preocupaciones que las que significaba su molestia dental.

Un reportaje de Página Siete detalla que el presidente del Colegio de Odontólogos de La Paz, Víctor Hugo Saavedra, informó que los nuevos protocolos de seguridad que  precisan todas las normas que deben cumplir los dentistas para la prestación del servicio fueron acordados con el Servicio Departamental de Salud (Sedes) que contemplan entre otros aspectos, el empleo de telemedicina que permitirá realizar una serie de preguntas como por ejemplo si el paciente llega de un viaje o no, su temperatura además de los malestares que pueda tener en su dentadura, como paso previo para  fijará la hora para la consulta”.

El directivo de los odontólogos paceños, según el reportaje, detalló que el protocolo establece que el paciente al llegar al consultorio deberá desinfectarse los calzados en una solución de hipoclorito, luego se le tomará la temperatura y si esta se encuentra dentro de los parámetros normales se le dotará de botas y bata para su atención, para lo que ingresará a la silla para su consulta; el odontólogo lo recibirá con todas las medidas de bioseguridad: overol, guantes, barbijos de tres capas y lentes de protección.

Antes de ser atendido, el paciente deberá hacer gárgaras con agua oxigenada para bajar la carga viral de la boca. “Nosotros emananos aerosoles (en la curación) y para ello implementaremos unos bastidores o pantallas que serán cubiertas con biofilm. Con este material también serán cubiertos los sillones”, añadió el dentista.

Al final, el paciente deberá lavarse la cara, las manos y el profesional deberá esterilizar todos los instrumentos que haya utilizado. Lo desechable será descartado (guantes y la bata  si son descartables); si no deberá ser esterilizada con amonio, lavada y  esterilizada para un uso posterior, señaló Saavedra.

“La implementación de todas las medidas de seguridad  significará que la atención se va a demorar. Posiblemente se atienda sólo cuatro pacientes en todo un día y en la medida que vaya mejorando la esterilización y la bioseguridad se podrá atender a más personas”, aseveró.

Costo para el paciente

El directivo del colegio de odontólogos de La Paz señaló que si bien  aún no realizaron un estudio exacto de la inversión que va a demandar la implementación de todas las medidas de protección, lanzó una aproximación; “estimo que la consulta estará entre los 250 a 300 bolivianos por lo bajo”, importe que  no incluye el trabajo del profesional en la curación”.

“No tenemos otra alternativa que subir el precio, porque debemos usar todo desechable. Imagine, la vestimenta debe ser cambiada para cada paciente y no son baratas” la implementación de las medidas de bioseguridad incrementará el costo de la consulta entre 100 y 150 bolivianos”, señaló otro dentista consultado en La Paz.

“Ese costo se debe pagar para cada servicio aunque sea una limpieza dental o cualquier curación mínima, porque el protocolo de bioseguridad será el mismo, el hecho que el paciente abra la boca es un riesgo; y la pistola para medir la temperatura cuesta 700 bolivianos”, agregó.

En ese contexto, el Colegio de Odontólogos de La Paz pidió al Gobierno el control de los precios  de los materiales de bioseguridad, la dotación de un seguro de vida ‘por estar altamente expuestos a contraer el virus’; la reducción de impuestos y que les permita descargar con facturas de todos sus gastos y no sólo los de consultorio, aunque el directivo del Colegio de Odontólogos no señaló en que beneficiaría a los pacientes la atención de sus demandas.

Gracias al coronavirus, el antiguo dicho que pregonaban las personas mayores “más vale u diente que un pariente”, parece ser cada vez más difícil de aplicar.