A cinco días del Primero de mayo COB espera respuesta a su demanda de incremento salarial

Brújula Digital |27|04|20|

A cinco días del primero de mayo, “día del Trabajo”, la central Obrera Boliviana (COB) aguarda la respuesta del gobierno a su demanda de incremento salarial para la presente gestión.

La posición fue expresada por el ejecutivo de la máxima organización de trabajadores de Bolivia, quien recordó que para este año, los trabajadores pidieron un incremento del 15% al haber básico y 10% al salario mínimo nacional (SMN) como base de discusión con el Gobierno.

“Es un derecho de los trabajadores; ellos no van a renunciar a ese derecho por más mínimo que sea”, afirmó Guarachi en entrevista con radio Panamericana y agregó que los trabajadores son consciente sobre la actual situación de emergencia sanitaria que se vive en el país por la pandemia del coronavirus, pero que antes de plantear cualquier  diálogo se espera una respuesta del Gobierno sobre la base de los porcentajes planteados.

 “Primero necesitamos una respuesta a nuestra propuesta, mientras no haya eso no podemos dar un criterio de hasta cuánto se puede flexibilizar” y añadió que para mañana e martes la dirigencia de la COB tiene acordada la realización de una reunión con personeros del Ministerio de Trabajo, cita en la que se espera recibir la respuesta o contrapropuesta oficial al planteamiento de los trabajadores.

Huarachi, consideró como “inaceptable” para los trabajadores del país la posición de algunos sectores empresariales de solicitar al gobierno, que no se otorgue ningún incremento salarial para esta gestión, considerando la situación económica que conlleva para el sector empresarial la emergencia sanitaria por el coronavirus y la cuarentena.

La Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) informó en pasados días, que la mayoría de sus empresas afiliadas, “rechazan que este año se otorgue el aumento al salario debido a la situación económica que atraviesa el país”, aunque precisó que existen empresas que se encuentran en la posibilidad de cancelar un aumento en función a la inflación registrada el año pasado de 1,47%.