Política | 20/01/2024

Defensoría dice que la detención preventiva es un abuso contra la dignidad humana

Según Pedro Callisaya, Defensor del Pueblo, dijo que la sobrepoblación provoca una mala atención en los centros penitenciarios

El penal de San Pedro en la ciudad de La Paz /Foto/RRSS

bannercenter
pub_h_mob

Brújula Digital |20|01|24|

La Defensoría del Pueblo afirmó este sábado que el uso de la detención preventiva atenta y es un abuso contra la dignidad de las personas que son sometidas a la medida. Asimismo, indicó que ello puede devenir en posibles hechos de tortura y malos tratos dentro de los centros penitenciarios.

“El uso desmesurado de la detención preventiva como un mecanismo punitivo previo, está atentando la dignidad del ser humano (…) porque el hacinamiento, la sobrepoblación, provocan debilidad en la atención los servicios en los centros penitenciarios, el tema de salud y los otros servicios que puedan darse al interior de cada una de las cárceles”, aseveró el Defensor del Pueblo, Pedro Callisaya.

Las afirmaciones de Callisaya se dieron en la presentación del proyecto “Con Buena Razón” que fue encarado por la Defensoría del Pueblo, el Instituto de Terapia e Investigación (ITEI) y Progettomondo Bolivia, con la cooperación de la Unión Europea.

Las tres instituciones se marcaron como meta contribuir a la prevención y lucha contra las formas más degradantes, crueles e inhumanas de tortura y otros malos tratos hacia la población privada de libertad, con especial énfasis en las mujeres y adolescentes, en ese marco se presentaron los avances de este importante trabajo.

La Defensoría del Pueblo realizó 270 visitas a las cárceles durante 2022, mientras que en 2023 efectuó otras 260 visitas, ya como Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura (MNP).

A partir de estas acciones in situ se alertó que el común denominador en las cárceles de Bolivia es “el uso desmesurado de la detención preventiva como un mecanismo que ya no es procesal, sino un mecanismo punitivo previo, que está atentando contra la dignidad del ser humano”.

Uno de los casos de detención preventiva que tuvo repercusión en el país es el encierro injustificado que sufrió el dirigente cocalero César Apaza, quien estuvo dentro del penal de San Pedro por un año y cuatro meses.

BD/MC



bannercenter
pub_h_mob


bannercenter
pub_h_mob
pub_med
pub_med
pub_med
pub_med
@brjula.digital.bo
pub_med
pub_med
pub_med
pub_med