Ante anuncio de bloqueo, Alcón pide a campesinos evistas reflexionar para no perjudicar

Brújula Digital |24|08|23| 

Tras el anuncio de un bloqueo nacional desde el 4 de septiembre, la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, pidió este jueves a campesinos evistas que reflexionen para no perjudicar a la población y aseguró que el gobierno es respetuoso de la “vida orgánica” de las organizaciones sindicales.

Luego de un ampliado, ayer miércoles, dirigentes de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB) del ala evista del MAS, al mando de Ponciano Santos, determinaron iniciar un bloqueo nacional de caminos indefinido si es que el presidente Luis Arce no destituye a los ministros de Gobierno y Justicia y no pide “perdón de rodillas” por la gasificación al congreso campesino que se desarrolló el fin de semana en El Alto.

“El bloqueo de caminos y lo que son los paros son un perjuicio para la población… la vía siempre es el diálogo, el consenso, el buscar escenarios en todo conflicto y siempre vamos a ir por ese lado… vamos a llamar a la reflexión, que no lleguemos a perjudicar a la población porque la vía siempre va a ser el diálogo”, afirmó Alcón en una rueda de prensa.

El fin de semana, en el congreso de la CSUTCB y tras una gasificación, este sector eligió a dos dirigentes paralelos: Lucio Quispe, que responde al ala arcista del MAS, y a Ponciano Santos, del ala evista.

El expresidente Evo Morales y dirigentes que le respaldan acusaron al gobierno del presidente Arce de haber promovido la gasificación, que dejó unos 800 heridos en El Alto.

Al respecto, Alcón aseguró que el gobierno es respetuoso de la “vida orgánica” de las organizaciones sindicales que son el sustento de la administración de Arce. Aseguró que estos sectores sindicales tienen su propia estructura y mecanismo de elección de dirigentes, aspectos que son reconocidos por el Ejecutivo.

Ayer miércoles, la sede de la CSUTCB fue entregada oficialmente a Quispe, luego de que efectivos de la Policía resguardaron la sede, ante el paralelismo de dirigentes campesinos.

BD/JJC