Petro cree que mafias paraguayas y uruguayas pueden infiltrar Bolivia debido al “cambiante mapa del tráfico de drogas”

Brújula Digital |12|08|23|

El presidente colombiano Gustavo Petro advirtió sobre “el cambio de la geografía” del tráfico de drogas en la región y, en ese sentido, indicó que mafias paraguayas y uruguayas podrían buscar establecer “economías ilícitas” en nuestro país.

“Es probable que con la nueva geografía del mercado de la cocaína, mafias paraguayas y uruguayas busquen construir una economía ilícita en Bolivia”, expresó Pero este sábado en un extenso texto publicado en la red social Twitter (llamada ahora “plataforma X”).

En su texto, Petro asegura que el aumento de la violencia de las mafias ligadas al tráfico de drogas se explica en que el precio de la cocaína ha bajado en EEUU debido a la presencia del fentanilo, lo que ha forzado a las organizaciones delictivas a buscar otras fuentes de financiamiento, como el tráfico de oro. El fentanilo es una sustancia altamente adictiva y mortal.

En su artículo, Petro destaca la transformación en el mercado de la cocaína y sus implicaciones en la región. Tradicionalmente, recordó, las áreas de cultivo y laboratorios de cocaína buscaban rutas hacia el norte, especialmente México, con destino a Estados Unidos.

Sin embargo, según Petro, estas rutas están experimentando un cambio progresivo hacia el sur, abandonando las costas para adentrarse en la selva amazónica cercana a los Andes.

“Hoy la mayor zona cocalera no se ubica en Tumaco en el pacífico nariñense (Colombia), ni en el Catatumbo. La nueva zona de mayor producción de cocaína del mundo se ubica en una franja de 10 kilómetros a lo largo de la frontera colombo ecuatoriana, del lado colombiano”, dice el texto.

Agrega que desde esta ubicación alejada del mar se están trazando nuevas rutas fluviales que se dirigen hacia el sur. Estas rutas llevan la droga hacia Brasil para abastecer el mercado brasileño, y desde allí se extienden a África y Europa; y hacia Ecuador y Perú para pasar a Asia oriental, a Japón y Australia.

“La razón detrás de este cambio es la disminución del mercado de la cocaína en los Estados Unidos, que ha sido reemplazado por un problema aún más grave: el fentanilo, una droga sintética que cobra la vida de alrededor de 100.000 personas al año”. Petro recuerda que la cocaína solía causar la muerte de alrededor de 4.000 personas anualmente cuando era mezclada con otras sustancias tóxicas en el mercado clandestino.

Entonces, las organizaciones armadas que operan en esas zonas están compensando la pérdida de ingresos de la cocaína involucrándose en actividades ilícitas como el contrabando de oro, la extorsión y el secuestro contra la población local.

Petro también subrayó la violencia que ha afligido al sur de América debido a esta nueva dinámica, con países como Ecuador superando en violencia a Colombia, y mencionó el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio como el resultado de estos cambios.

El presidente también planteó la posibilidad de que los laboratorios de cocaína se trasladen a Europa para competir con la invasión de drogas químicas como el fentanilo.

Petro concluyó señalando que, a pesar de los cambios en la geografía del tráfico de drogas, el fracaso en la lucha antidrogas persiste, empeorando la situación general. Sugirió que Colombia podría encontrar una vía hacia la paz al no poder competir en la producción industrial de fentanilo.

En esta coyuntura, el mandatario enfatizó la importancia de que el gobierno se prepare para enfrentar el aumento del consumo de fentanilo entre los jóvenes. Propuso en ese sentido la instalación de puestos de detección gratuita en áreas de entretenimiento y una campaña de educación sobre los peligros mortales de esta sustancia.

BD/RPU