Política | 06/07/2023

En diálogo sobre la Cumbre UE-CELCAC se reclama que en 8 años no ha habido reuniones de alto nivel para evaluar avances

El reclamo fue puesto en el diálogo por el embajador de España, Javier Gassó.

Diálogo sobre la Cumbre UE-CELCAC. Foto/ABI

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Brújula Digital |06|07|23|

Durante un diálogo realizado este jueves en La Paz como preparación de la próxima Cumbre UE-CELAC, prevista para el 17 y 18 de julio en Bruselas, sede de la Unión Europea, se establecieron los puntos centrales de lo que se espera será esa reunión, a la que están invitados más de 60 jefes de Estado y de Gobierno.

Participaron del evento de manera presencial el embajador de España, Javier Gassó, cuyo país preside actualmente la UE, el representante en Bolivia de la UE, Michael Doczy, y el canciller Rogelio Mayta. A distancia estuvieron el Director para las Américas del Servicio Europeo de Acción al Exterior, Javier Niño, desde Bruselas, y José Antonio Sanahuja, director de la Fundación Carolina, desde Madrid.

Junto con comentar las buenas relaciones de amistad y el interés de estrechar las relaciones entre los dos bloques, el embajador Gassó expresó que “desde hace más de ocho años que no ha habido ninguna reunión de alto nivel, de jefes de Estado o gobierno, entre los países de la Unión Europea y de América Latina y el Caribe”, para analizar los avances en las relaciones.

“Los acuerdos de libre comercio cuesta sacarlos adelante. España, como ustedes saben, ha asumido la presidencia rotatoria de la UE el 1 de julio pasado y entre sus grandes prioridades está darle la vuelta a esta situación, cambiar las cosas y definitivamente darle un impulso a la asociación natural que existe entre nuestras dos regiones”, agregó.

En la inauguración de un desayuno informativo entre más de 100 asistentes en Bolivia, Javier Niño afirmó que la próxima Cumbre UE-CELAC “es un nuevo punto de partida para la relación con América Latina”.

“Deseamos crear un mecanismo de coordinación y diálogo permanente”, dijo, a tiempo de destacar que el evento internacional servirá para canalizar preocupaciones comunes, especialmente en temas medioambientales y de desarrollo, según una nota de prensa de la UE.

El evento de este jueves contó con la presencia de más de un centenar de líderes políticos de todos los sectores, empresarios y líderes de opinión. De parte del gobierno, el canciller Rogelio Mayta afirmó que la cumbre es producto de un trabajo conjunto realizado de manera previa.

“Tenemos toda la intención de reforzar las relaciones con la UE; pero también nos ha parecido importante el escenario mundial. Es un tiempo de cambio de era y Bolivia tiene toda la disposición de sumarse a esto. Bolivia entiende bien que su vocación es de articulación con la comunidad internacional, con respeto a su soberanía”, dijo la autoridad.

Por su parte, el Embajador de la UE en Bolivia, Michael Dóczy, expresó que la Cumbre abre una oportunidad para tratar juntos problemas comunes, especialmente relacionados con los desafíos de un desarrollo verde, energías renovables, la paz y la seguridad.

“Somos el mayor inversor en América Latina, y queremos seguir invirtiendo en áreas de interés común. Tenemos en marcha una herramienta nueva llamada Global Gateway, que nos permitirá hacer inversiones grandes en áreas estratégicas de interés común, de forma sostenible y protegiendo al medioambiente”, dijo Dóczy.

El desayuno es parte de una iniciativa de la Fundación para la paz y la Democracia, la embajada de España, Kreab y la Delegación de la UE en Bolivia. Se replicará en tres ciudades de Bolivia, para permitir que la temática de las relaciones UE-CELAC sea más conocida y se incorpore al diálogo democrático.

El miércoles 5 de julio se dio un impulso importante a la cumbre con el anuncio del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, de que sí asistirá a la cita. Se considera que ello destrabará la decisión de otros líderes latinoamericanos.

Lula había puesto en duda hasta ahora su asistencia a la cumbre UE-CELAC, la cual en ambos bloques ya ha sido considerada como una oportunidad para intentar darle un nuevo “impulso político” al acuerdo con el Mercosur, que tanto el líder brasileño como el español, Pedro Sánchez, han dicho que quisieran concluir este mismo año.

De acuerdo con la nota divulgada por la Presidencia brasileña, Sánchez también invitó a Lula a acompañarle en la apertura de un foro empresarial que será celebrado en Bruselas el próximo 17 de julio, un día antes de la Cumbre UE-CELAC.

Las principales trabas para el texto consensuado en 2019 por ambos bloques pasan por la negativa del Mercosur a aceptar un documento anexo presentado este mismo año por la UE, que establece unas nuevas garantías en materia medioambiental.

Ese documento fue considerado por Lula como una “amenaza” a los productores agrícolas del Mercosur, bloque que, según confirmó este martes en su cumbre semestral, celebrada en Puerto Iguazú (Argentina), trabaja en una respuesta que, en palabras del mandatario brasileño, deberá ser “contundente”, informó la agencia EFE.

El Gobierno de Lula también ha manifestado cierto recelo sobre el capítulo de compras gubernamentales del texto acordado en 2019, que es compartido por Argentina y sobre el cual Paraguay y Uruguay no han expresado una posición clara.

BD / RPU



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