¿Qué demandaron las nueve marchas indígenas y qué pide ahora?

Brújula Digital |16|09|2021|

La lucha de los pueblos indígenas de tierras bajas no es reciente. En 1990 se registró la primera marcha en defensa de su territorio, 31 años después la agenda no varió mucho.

“No somos pueblo si  nosotros no defendemos lo que es nuestro, lo que nos dejaron nuestros padres; no somos pueblo si nosotros no le damos valor lo que va a servir a nuestros hijos; no somos pueblos si no tenemos la fuerza suficiente para transmitir a nuestros hijos que el territorio es nuestra vida” proclama el dirigente indígena Marcial Fabricano, quien en 1990 emprendió camino hasta La Paz y ahora nuevamente toma la delantera de la marcha indígena que se dirige a Santa Cruz de la Sierra.

Para los indígenas, la tierra forma parte de la esencia o existencia de los pueblos indígenas por lo que "nunca (se debe) olvidar, nunca (se debe) abandonar, nunca (se debe) renunciar  al  territorio porque ahí está la vida donde se nace, vive, trabaja  y descansa el indígena”.

En las nueve marchas protagonizadas hasta ahora las demandas tuvieron ejes como la defensa del territorio y la vida como dos elementos indispensables, según un registro realizado por CIPCA.

Primera marcha indígena (1990)

Los indígenas de tierras bajas protagonizaron la primera marcha "por el Territorio y la dignidad" con el objetivo de que el Estado reconozca la existencia de los pueblos indígenas y reconozca el derecho a la propiedad de sus territorios.

Segunda marcha indígena (1996)

Indígenas y campesinos de varias regiones de Bolivia demandaron el "respeto a sus territorios, desarrollo y participación política de los pueblos indígenas" y entre las demandas específicas pidieron al Gobierno el reconocimiento jurídico de todos los territorios indígenas de tierras bajas mediante la titulación como propiedades colectivas.

Tercera marcha indígena (2000)

Esta marcha también tuvo la participación del sector campesino y el tema central fue "la tierra, el territorio y los recursos naturales" con los objetivos de "lograr el reconocimiento jurídico del derecho indígena sobre los recursos naturales existentes en los territorios indígenas" y "acelerar la tituación de los territorios indígenas y las tierras comunales".

Cuarta marcha indígena (2002)

Esta movilización también se realizó en alianza con los campesinos en demanda de "soberanía popular, el territorio y los recursos naturales" con el objetivo de cambiar la visión de país, de un Estado monocultural a un Estado plurinacional.

Quinta marcha indígena (2006)

Los indígenas tuvieron que salir nuevamente a las carreteras para demandar la inclusión social y política, y el saneamiento de sus tierras pese a los compromisos asumidos por el Gobierno.

Ese año también demandaron el desalojo de los asentamientos en la Tierras Comunitarias de Origen (TCO) y la redistribución de tierras fiscales a campesinos e indígenas sin tierra o con tierra insuficiente.

Sexta marcha indígena (2007)

En 2007, los indígenas se movilizaron nuevamente y esta vez por las autonomías indígenas, tierra y territorio, y un Estado plurinacional que reconozca la "preexistencia de las naciones y pueblos indígenas" y su participación en todos los niveles de gobierno.

También demandaron que los pueblos indígenas tengan derecho a la autonomía y que esté subordinada a otro nivel de autonomía como las departamentales.

Otra de las demandas fue la propiedad de los recursos naturales de los territorios y comunidades indígenas, y también pidieron que los pueblos indígenas tengan representación directa de las naciones indígenas en la Asamblea Legislativa.

Séptima marcha indígena (2010)

Los indígenas nuevamente salieron a marchar en "defensa del territorio, la autonomía indígena y los derechos de los pueblos indígenas" y entre sus demandas específicas pidieron al Estado que de la seguridad a la existencia de los pueblos indígenas mediante la aplicación de medidas como la consulta previa, dotación de tierras fiscales a comunidades con tierras insuficientes, flexibilizar requisitos para constituir las autonomías indígenas y pidieron la creación del Fondo Indígena.

Octava marcha indígena (2011)

Esta marcha fue reforzada por indígenas de tierras altas organizados en el Conamaq y fue en "defensa del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS), por los territorios, la vida, la dignidad y los derechos de los pueblos indígenas" y en concreto demandó que la carretera Villa Tunari (Cochabamba) - San Ignacio de Moxos (Beni) no atraviese el TIPNIS porque abriría la puerta a los avasallamientos de sus territorios como ocurrió en otros lugares.

También pidieron la seguridad territorial para los territorios indígenas ante políticas públicas implementadas por el Gobierno sin una consulta previa como establece la Constitución Política del Estado.

Novena marcha indígena (2012)

Los indígenas de tierras bajas salieron a marchar en defensa de sus territorios que pese a que el entonces presidente Evo Morales decretó que no construiría la carretera por el TIPNIS intentó revertir su decisión con una "posconsulta" a los pueblos indígenas y para eso internó militares y funcionarios a las comunidades indígenas con "regalos" como motores fuera de borda, antenas de Entel, herramientas, alimentos y otros servicios.

El territorio, la demanda regresa

La marcha que ahora se dirige a Santa Cruz de la Sierra demandan respeto a sus territorios que son avasallados por los llamados "interculturales" al amparo del Gobierno y demandan seguridad jurídica al Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA).

31 años después de la primera marcha el respeto al territorio y a la dignidad de los pueblos indígenas de tierras bajas son los temas centrales de la agenda indígena pese a que los diferentes gobiernos dieron respuestas a muchas de sus demandas.

BD/JCV