El MAS permanece solo con su tesis de “golpe de Estado”, cuatro actores lo rebaten

Brújula Digital |16|06|21|

El MAS se mantiene solo con su tesis de que en 2019 hubo “golpe de Estado”, tras la renuncia de Evo Morales a la Presidencia. La Iglesia Católica, la Unión Europea (UE), el Conade y Comunidad Ciudadana (CC), actores que participaron en el diálogo abierto ese año, rebaten esa tesis y aseguran que la sucesión de Jeanine Añez fue constitucional, ante el vacío de poder dejado por Morales.

El martes, con la presentación de su informe-memoria, la Iglesia Católica abrió un nuevo capítulo dentro del debate abierto por la crisis poselectoral que se desató en 2019, cuando el 10 de noviembre Morales se vio obligado a dimitir tras denuncias de fraude electoral en los comicios de octubre de ese año, luego de que la Organización de los Estados Americanos (OEA), en una auditoría al cómputo, estableció que hubo “manipulación dolosa, parcialidad de la autoridad electoral, alteración de actas, fallas en la cadena de custodia y falsificación de firmas”.

Con su documento, la Iglesia Católica señaló que considera necesario que se conozca la verdad y, a partir de ahí, se reconstruya la unidad nacional, cuando actualmente, el Movimiento Al Socialismo (MAS) y el gobierno del presidente Luis Arce impulsan el juicio penal denominado “golpe de Estado”, en el que son acusados la expresidenta Jeanine Añez y cinco exministros, de los que dos (Álvaro Coimbra y Rodrigo Guzmán), además de la exmandataria, se encuentran en la cárcel, en calidad de detenidos preventivos. En ese proceso fue convocado a declarar, en calidad de testigo, Carlos Mesa, presidente de la alianza opositora CC. 

Este informe de la OEA, que fue la base para sustentar que hubo fraude electoral, fue respaldado por la misión electoral de la UE, aseguró la Iglesia Católica en su documento, en el que además reveló que, tras la renuncia de Morales, en el diálogo de pacificación del país, la entonces presidenta del Senado Adriana Salvatierra (MAS)y la primera vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Susana Rivero (MAS), rechazaron asumir la Presidencia, en sucesión constitucional, por considerar que la vida de ambas “corría riesgo”.

Además, la Iglesia Católica señaló que el MAS aceptó reconocer la presidencia del Senado Jeanine Añez, por entonces segunda vicepresidenta del Senado, y, por ende, de la Presidencia de Bolivia, en sucesión constitucional. Acotó que el MAS propuso dos salidas que fueron rechazadas por ser inconstitucionales: que se elija al sucesor de Morales de entre los asambleístas del MAS o que el senador de oposición Víctor Hugo Zamora asuma el mando del país.

Esa sucesión, en el marco de lo establecido en la Carta Magna, reconocida por la Iglesia Católica también fue respaldada por la Unión Europea. El 29 de abril, la vicepresidenta del Parlamento Europeo, Dita Charanzová, exigió la liberación inmediata de Áñez y afirmó que la sucesión presidencial de 2019 fue “constitucional”.

Otro de los actores que participaron en el proceso de diálogo y pacificación del país fue el Comité Nacional de Defensa de la Democracia (Conade). Manuel Morales, integrante del Conade, rechazó la tesis de golpe de Estado del MAS y aseguró que Evo Morales, al renunciar, dejó un vacío de poder. En ese sentido, indicó que, al no haber un gobierno constitucional, después del 10 de noviembre, mal se puede decir que haya habido conspiración o “golpe de Estado” en contra de una autoridad.

Este miércoles, Mesa también rechazó la tesis de golpe de Estado, luego de Comunidad Ciudadana (CC) también fue parte del diálogo de 2019. Acusó a Evo Morales, y al presidente Luis Arce de "armar" el juicio penal “golpe de Estado”.

Mesa sostuvo que una de las pruebas de que no hubo golpe de Estado son las leyes 1266, que anuló las elecciones presidenciales de 2019 señaladas por fraude, y 1270, que prorrogó la gestión de la entonces presidenta Añez. Resaltó que ambas normas fueron aprobadas por la mayoría parlamentaria del MAS, por lo que los entonces presidentes del Senado y de la Cámara de Diputados, Eva Copa y Sergio Choque (MAS), respectivamente, también debían ser procesados.

El MAS expresó su rechazo a esas posiciones. Rivero, que fue nombrada por la Iglesia Católica en su documento, negó que le hayan ofrecido la Presidencia. Por el contrario, indicó que no hubo vacío de poder en 2019, debido a que el 10 de noviembre, tras la renuncia de Morales, ya se tomó la decisión de que Añez asuma la Presidencia.

El senador Adolfo Flores (MAS) incluso anunció que se mandará la inconstitucionalidad de la ley 1270, en el acápite en el que se reconoce como constitucional la gestión presidencial de Añez. Insistió en que debe ser la Fiscalía, a través de la investigación, la que establezca responsabilidades dentro del proceso “golpe de Estado”.

BD/JJC