Política | 13/11/2020

Tras su posesión, Arce dio un giro a las relaciones exteriores de Bolivia

Desde la posesión del Mandatario, se dieron cambios en las relaciones bilaterales de Bolivia con al menos seis países, de los que dos, Irán y Venezuela, enviaron a sus nuevos embajadores a los tres días de la asunción del nuevo gobierno

El presidente Luis Arce y el embajador de Irán, Mortessa Tabreshi. Foto: Infobae

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Brújula Digital |13|11|20|

Desde la asunción del presidente Luis Arce, hace casi una semana, la política exterior del país dio un giro al manejo implantado por la administración de Jeanine Añez. Desde el mismo día de la posesión del Mandatario se vieron los cambios en el relacionamiento con al menos seis países, de los que dos, Irán y Venezuela, presentaron a sus nuevos embajadores a los tres días de haberse instaurado el nuevo gobierno.
Al acto de posesión de Arce asistieron el rey de España, Felipe VI, y el presidente de Argentina, Alberto Fernández. El Rey de España volvió a Bolivia después de 10 años, debido a que el expresidente Evo Morales no invitó a su última posesión como Presidente por considerar que era "una forma de liberarnos de monarquías". Pero, además, el gobierno de Añez tuvo un incidente con el gobierno español, tras la expulsión de dos funcionarios de esa legación diplomática que se vieron implicados en un supuesto operativo de rescate a exministros que estaban asilados en la residencia de la Embajada de México en la ciudad de La Paz.
La presencia de Fernández marcó un nuevo relacionamiento de Bolivia con Argentina, debido a que el Mandatario, en reiteradas oportunidades, se refirió a la asunción de Añez a la Presidencia como un “golpe de Estado”, por lo que no la reconoció. Esa postura fue respondida por la exmandataria, quien aseguró que el Jefe de la Nación Argentina no tenía “información correcta”. En el marco de las relaciones bilaterales, Bolivia designó solo un encargado de negocios en el país vecino, no un embajador.
En el marco de ese nuevo relacionamiento con Bolivia, Fernández incluso acompañó a Morales cuando éste retorno a Bolivia, después de permanecer como refugiado político por 11 meses en el país vecino, tras salir del país por acusaciones de fraude electoral en noviembre de 2019.
Otro cambio explícito en la política exterior de Bolivia se dio con Irán. En un principio se dijo que el presidente de ese país iba a asistir a la posesión de Arce, pero ello no se concretó. En todo caso, el miércoles, tres días después del cambio de gobierno, la administración iraní envió a su embajador Mortessa Tabreshi, quien presentó sus cartas credenciales. A mediados de este año, Añez cerró la Embajada de Bolivia en Irán.
El mismo día, el gobierno venezolano de Nicolás Maduro envió a su nuevo embajador en Bolivia, Alexander Yánez. El canciller de Venezuela, Jorge Arreaza, denunció el desmantelamiento de la sede de su misión diplomática en el tiempo que Añez gobernó Bolivia y escribió en su cuenta de Twitter: “Cuesta entender la conducta voraz y destructora de los usurpadores en nuestras sedes diplomáticas en #Bolivia.  ¿Qué sentido puede tener desvalijar, desmantelar y robarse desde el busto del Libertador, hasta vehículos, televisores y la vajilla? ¿Qué clase de barbarie es esta?”.
“Luego de 10 meses de un cierre arbitrario e ilegal de Pdvsa Bolivia, el canciller Jorge Arreaza recupera las instalaciones y reivindica la lucha de los trabajadores que fueron sometidos a las más viles agresiones por parte de la dictadura”, se agregó desde la Cancillería de Venezuela.
La administración de Añez no reconoció a Maduro como presidente de Venezuela, sino a Juan Guaidó, por lo que el 20 de octubre recibió las cartas credenciales del embajador designado por éste, José Cumare.
El otro cambio se dio con Cuba, país con el que Añez también rompió relaciones tras asumir las Presidencia en noviembre de 2019. El canciller de ese país, Bruno Rodríguez, saludó la posesión de Arce y justificó su ausencia en ese evento. “Saludamos la toma de posesión del presidente electo de #Bolivia Luis Arce y su vicepresidente David Choquehuanca. Al no poder asistir por razones ajenas a nuestra voluntad, enviamos nuestra solidaridad al hermano pueblo boliviano y apoyo al gobierno elegido por voluntad popular”, escribió el diplomático en su cuenta de Twitter.
Lo mismo pasó con Nicaragua, cuyo presidente, Daniel Ortega, felicitó a Arce por su triunfo en las elecciones. La administración de Añez rompió relaciones con ese país y, a mediados de este 2020, cerró la embajada que Bolivia tenía en ese territorio.
BD/JJC

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