Pese al enfrentamiento entre mototaxistas y vecinos en Warnes, continúa el paro cruceño

Brújula Digital |06|11|20|

Un grupo de mototaxistas se enfrentó con vecinos de la población cruceña de Warnes antes del mediodía de este viernes. Efectivos policiales apaciguaron los ánimos y del conflicto un efectivo policial salió con la fractura de cuatro costillas y el paro cívico departamental continúa.

Un suboficial de policía quedó herido cuando intentaba apaciguar un enfrentamiento entre bloqueadores y mototaxistas en el municipio de Warnes. El director nacional de la fuerza anticrimen, Alberto Aguilar, informó que el policía herido recibió una pedrada que le causó las fracturas.

“Ha sufrido lesiones un suboficial de la FELCC de Warnes, al cual con una piedra le han fracturado cuatro costillas y él ha sido internado en Santa Cruz”, indicó el jefe policial. Señaló que el policía fue herido cuando intentaba separar el enfrentamiento entre unionistas que cumplían el paro cívico y mototaxistas que desbloquearon el sector.

Enfrentamientos en Plan 3.000

En un lado jóvenes vigilantes que respaldaban el paro cívico; por el otro, un grupo nutrido de mototaxistas se aproxima desde la rotonda del Plan 3.000. Gritos, petardos y alguna que otra piedra provocan escenas indeseables. Todo sucede en cuestión de segundos, según reporte de El Deber.

Los vecinos del barrio 24 de Septiembre, unos 40 a esa hora, resguardan el bloqueo en la avenida 16 de Julio, zona de la Campana. Desde las cero horas de este viernes se han turnado para cumplir el pedido del Comité pro Santa Cruz.

Poco después de las 11:00, comienzan a llegar los mototaxistas al obelisco, en el corazón del Plan 3.000. Ataviados con sus chalecos y respaldados por sus cascos de protección, avanzan por la avenida para confrontar a los vecinos.

Cerca ya de los bloqueadores, y amparados en la rapidez de sus motos, comienzan a lanzar petardos hacia los jóvenes. Una vecina, que observó el enfrentamiento, cuenta lo ocurrido: “vinieron de la rotonda tirando petardos a quemarropa”. Y señala que mientras lanzaban las pausas proferían amenazas constantes.

Ante las primeras agresiones, los vecinos responden con petardos y  piedras para hacer frente a los mototaxistas. Desde las calles aledañas, vecinos y familias se agruparon para respaldar a los bloqueadores.

Con la llegada de la policía, unos 15 o 20 minutos después, la confrontación logra apaciguarse aunque se mantiene la tensión entre los mototaxistas, replegados en la rotonda de la ciudadela, y los vecinos, que continúan parapetados en el bloqueo.